martes, 1 de noviembre de 2011

Pautas de liderazgo.

Contamos con la ayuda de una educadora canina. Silvia nos irá respondiendo a todas las dudas que nos surjan sobre el comportamiento de nuestros perros.

A continuación os explicamos unas pautas que deberéis ir siguiendo.
Dichas pautas son necesarias para hacerle entender a tu perro que eres tú la que mandas. También las tendrán  que realizar todos los miembros de la casa.

Para los perros, el jefe es el que maneja los recursos, que son:

·        El espacio /territorio.
·        La comida.
·        El paseo.
·        El juego

¿Cómo controlar el espacio/territorio?

-Cuando tu perro se acerque a ti no debes mirarlo ni tocarlo, reclama tu espacio. Si se te sube échalo, lo puedes hacer simplemente empujando con el cuerpo. Si se te echa a los pies mándale a su sitio.

-Si quieres acariciarlo asegúrate de haberlo llamado antes. Pídele algo como que se siente y entonces acarícialo lo que quieras.
Nada va a ser gratis, a partir de ahora para todo debes pedirle antes que haga algo, antes de salir de casa, antes de comer, antes de jugar, antes de darle una chuche.

-Cuando vayas andando nunca lo esquives si está por medio, sigues adelante con  el cuerpo para que sea él el que se aparte, tú debes tener siempre tu espacio y él abrirte paso.

-Si se tumba en sitios por donde pasas, lo mismo, apenas te detienes y le das un toque con el pié para que se levante y pases libremente.

-Cuando salgas y entres a una habitación o la puerta de casa, asegúrate de ser siempre la que va delante. Si se adelanta dile Shhh!! eh ! que retroceda y sales o entras primero, si hace falta bloquéalo con el cuerpo.

-Si le dejas subir al sofá asegúrate de darle permiso antes. Si no le has dado permiso para subir al sofá debe bajar a la orden. Si se resiste atráelo  con una chuche hasta que se baje.

¿Cómo controlar la comida?

Dale de comer siempre después de que te vea comer primero a ti. Luego pide que se siente y le pones comida, si no se la come en 15 minutos la retiras, ha perdido su turno.

¿Cómo controlar el paseo?

-Tu perro  debe sentarse antes de salir.

-Durante el paseo no dejes que vaya oliendo ni marcando. Si es necesario le das tirones con la correa para que se centre en tu paso y mire al frente.
Después de 20 minutos andando así, puedes aflojar correa y dejarle oler y que haga  sus cosas durante un rato. Pasados esos 20 minutos de nuevo debe estar  controlado sin olisquear ni marcar.

¿Cómo controlar el juego?

-Si tiene juguetes no los dejes todos por ahí, recógelos y cada dos días los vas cambiando dejando un par.

-A la hora de jugar con tu perro eres tú la que  comienzas el juego y tú la que lo acabas, no cedas cuando te traiga un juguete por iniciativa propia sino ignóralo, si te apetece jugar con él, deja que pase unos minutos hasta que desista y deje el juguete, entonces lo coges y comienzas el juego con él.
Comienza tú el juego y antes de que se canse guardas el juguete y lo das por finalizado.

-Juego de la pelota: el juego tiene que ser controlado. Si le tiras una pelota y la trae, antes de volverla a tirar tendrá que sentarse primero.

A la vez que muestras que eres su líder, todos estos ejercicios sirven para que tenga autocontrol y se acostumbre a ser paciente y no conseguir todo a base de saltos, ladridos y todo tipo de exigencias, que al final nos llevan a un estado de nerviosismo fuera de control en el que puede pasar cualquier cosa.

¿Cómo obrar cuando llega un perro por primera vez a casa?

-Como el perro aún no te conoce bien ni tú a él, cuando tengas encuentros con otras personas diles que no lo toquen ni lo miren. Sólo deberán acariciarlo o contemplarlo cuando a el perro se le vea relajado, incluso con curiosidad, entonces puedes pedir a esa persona que le pida que se siente y le de una chucho. Poco a poco se irá acostumbrando así a tener visitas o estar con otras personas sin sentirse agobiado ni inseguro.

-El obrar de esta manera es mucho más efectiva que tumbar al perro en un momento dado o enfrentarte a él en una situación, por qué? porque le estás demostrando día a día que eres tú la que manda y que se siente seguro contigo, viendo que no tiene otra responsabilidad que la de obedecerte y así será más feliz. Sin embargo si lo que haces día tras día está lleno de incoherencias, permitiéndole caprichos, caricias a destiempo y otras cosas, en un momento dado que lo quieras controlar no va a ser nada efectivo, incluso podrías llevarte un bocado, pues al pensar que él es el jefe le estás interrumpiendo en su forma de solucionar las cosas y te corrija de esa manera. Y él no está preparado para mandar.
Así que la educación de un perro es el día a día. No una frase o movimiento mágico. Todo tiene que tener una buena base.

-Salvando las distancias de perro-niño...por poner un ejemplo fácil de entender: ¿qué clase de efecto tendría una bofetada en un niño cuando se porta mal si tuviera una madre que le dejara no ir a colegio cuando quisiera, que le dejase picar entre horas, le cambiase de comida hasta encontrar una que le gustara, le dejara subir a la cama de los padres y saltar con los zapatos puestos, dar patadas a los vecinos en el ascensor, reñir con otros niños? Ese niño por muy bueno que fuera terminaría siendo un tirano, y lo que es peor, un infeliz. Si no les permitimos a nuestros hijos esas cosas, que con ellos se puede hablar, por qué a nuestros perros sí??? NO LES HACEMOS NINGUN FAVOR, ESO NO ES AMOR, es satisfacer nuestros deseos de amar y consentir a alguien. Hay que dar lo que uno necesita que le den, no lo que uno quiere dar.

1 comentario:

  1. Es una orientación extraordinaria animo estas son los motivos por los que merece la pena trabajar y hacer feliz la vida de nuestros perros con una buena orientación


    Felidades

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